Si, me ha dado pereza escribir, ¿y qué?. En realidad la razón es porque no tengo en orden mis ideas, como ya lo había predicho la sobrecarga de trabajo me descontrolo. Es triste ver como incluso conociendo los riesgos terminas comentiendo el error, pero hay cosas que son muy difíciles de evitar.
Todavía no puedo decir que todo este bien, sigo con pocas ganas de trabajar, y dedicando mi tiempo a actividades de poco provecho, o mejor dicho ninguno. Hasta el momento había estado evitando estos desastres emocionales cambiando de actividad y tratando de no sobreexigirme, pero con un proyecto tan demandante como este me fue imposible evitarlo.
Tengo que tener en cuenta que al aumentar la carga por un lado de la ecuación, es también recomendable aumentarla por el otro lado. Será buena idea buscar incluir en mi agenda algunas actividades físicas de alto rendimiento, y algo de esparcimiento adecuado.
Lo bueno es que se acercan las vacaciones y tendre tiempo para ponerlo todo patas arriba, como es debido. Hasta entonces, buscare la manera de terminar lo poco que me queda por hacer.
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